ERC y Democràcia i Llibertat (DiL, la marca de Convergència en las elecciones generales) tendrán grupo propio en el Senado gracias a la amabilidad mostrada por el PSOE en las últimas horas. Los socialistas cederán dos de sus senadores a ERC y otros dos a DiL para que puedan constituirlo. El PSOE atribuye la decisión a los «usos y costumbres» de la Cámara Alta y recuerda que en la legislatura anterior lo hicieron con el PNV. No obstante, el partido admite que «llama la atención por el momento político en que nos encontramos».
Al Grupo Socialista no le ha supuesto un inconveniente que ambos partidos estén enrolados en el proceso de ruptura de Cataluña con España. De hecho, ERC ya ha anunciando que sus primeras iniciativas parlamentarias en la Cámara Alta serán sobre el derecho de autodeterminación y la propia disolución del Senado. El PP, pese a las dudas manifestadas en un principio, acabó asegurando que la decisión del PSOE de ayudar a ERC y a DiL es «impresentable».
Según la cesión realizada por el PSOE, hasta el próximo martes cuatro senadores socialistas formarán parte de ERC y de DiL para cumplir con los requisitos que marca el Reglamento de la Cámara Alta. Para configurar grupo en el Senado son necesarios 10 parlamentarios. Los dos partidos catalanes tenían sólo ocho: seis elegidos el 20-D y dos más por designación autonómica. Gracias al gesto del PSOE de cederles formalmente dos, contarán con voz propia en el Senado. La Mesa deberá previamente avalar que cumplen las condiciones exigidas.
Algo parecido sucederá en el Congreso, aunque en este caso con la aquiescencia también del PP. DiL y ERC no cumplen con todos los requisitos que exige el Reglamento de la Cámara Baja: al menos cinco diputados y el 15% de los votos en las circunscripciones en las que ha concurrido. Ninguno de los dos partidos catalanes ha alcanzado este porcentaje en la provincia de Barcelona. Pese a ello, PP y PSOE son favorables a que puedan formar grupo, interpretando que el Reglamento se refiere al conjunto de circunscripciones en las que se presentaron. Al hacer la media en las cuatro provincias catalanas superan el 15%. No obstante, en otras ocasiones la norma se ha aplicado de modo contrario.
Fuentes del PSOE explicaron ayer que su única voluntad es que «la dos Cámaras arranquen con la mayor pluralidad». El portavoz socialista en el Senado, Óscar López, defendió que la decisión de ceder sus senadores es sólo un gesto de «cortesía parlamentaria», habitual al inicio de la legislatura. El PSOE, aseguró, mantiene «discrepancias profundísimas» con DiL y está «radicalmente en contra» del proceso independentista en Cataluña. «Pero una cosa es eso y otra es la cortesía parlamentaria y los usos y costumbres de una cámara territorial como es el Senado, y subrayo lo de cámara territorial para permitir que tengan grupo propio, porque lo contrario sería un desastre», insistió López.
Lo cierto es que desde el PP se había reconocido previamente que la organización por grupos mejora el funcionamiento de la Cámara, mucho más complicada de gestionar con más de 20 senadores en el Grupo Mixto. No obstante, el momento político que atraviesa el país y la decidida apuesta de DiL y ERC por la desconexión de Cataluña de España contaminan este movimiento del PSOE.
El PP, aunque en principio pudiera respaldar la cesión de diputados, acabó el día asegurando que se trataba de algo «inadmisible». Su portavoz en el Senado, José Manuel Barreiro, defendió que los socialistas están «pactando con los partidos que quieren romper España». «El PSOE, que dice estar por la unidad de España y la defensa de la soberanía nacional, tiene un discurso y luego hace otra cosa», dijo, para añadir a continuación que es «intolerable» que faciliten la estrategia de las formaciones independentistas.
El vicesecretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, manifestó también que no entienden la decisión del PSOE «porque ERC ya ha anunciado que su primera iniciativa será que la Constitución recoja el derecho de autodeterminación en Cataluña». «Se trata», añadió, «de una propuesta que está en las antípodas del discurso que enarbola el nuevo presidente del Congreso de los Diputados, Patxi López, y de las directrices que el Comité Federal del PSOE dio al señor Sánchez de no llegar a acuerdos con partidos que pretendan romper España», informa Raúl Piña.
Desde el PSOE, Óscar López reiteró que «no hay ningún acuerdo político» y fuentes socialistas apuntaron que no pueden evitar que la primera moción del portavoz republicano en el Senado, el ex juez Santiago Vidal (suspendido por redactar la Constitución catalana), sea la defensa del derecho de autodeterminación. «Lo presentarían igual si estuvieran en el Grupo Mixto», dijeron en el PSOE.
ERC y DiL aseguraron también que el pacto se circunscribe al Senado y que la contrapartida, según fuentes de Convergència, fue que votaron a favor de los miembros socialistas en la Mesa de la Cámara Alta, cuando en principio pensaban abstenerse. «No hay dobles lecturas», señalaron.
Ni para los dos partidos catalanes ni para el PSOE el acuerdo en el Senado presupone nada de cara a la posible investidura de Pedro Sánchez. Fuentes socialistas sostuvieron ayer que no hay ningún tipo de negociación en marcha.
En Cataluña, DiL ya ha hecho alguno guiño a su preferencia por un Ejecutivo central que no esté presidido por Rajoy, pero fuentes socialistas apuntan que su oferta de investidura no se dirigirá a los dos partidos independentistas. La propuesta de pacto, señalan, se hará a Ciudadanos y a Podemos para lograr un «Gobierno de cambio y estable». ERC y DiL «harán lo que les parezca oportuno». Las mismas fuentes aseguran que la negativa inicial de Ciudadanos y Podemos a un Ejecutivo conjunto forma parte de los prolegómenos de una posterior negociación.
